El Círculo acoge una exposición de trajes tradicionales canarios

Muestra de una docena de vestimentas de faena de distintos oficios de finales del XIX y comienzos del XX

El Círculo de Amistad XII de Enero ocoge durante este mes de mayo una exposición de trajes tradicionales de Canarias. El diseñador Miguel Ángel Castilla es el comisario de la muestra, donde se exhiben una docena de vestimentas de faena de distintos oficios de finales del siglo XIX y comienzos del XX, tanto de hombre como de mujer.

Tenemos la lechera, donde predominan el blanco y el negro, con sus cestos y cántaros. El ganadero, ataviado con su manta para protegerse de las inclemencias del tiempo durante las jornadas de pastoreo. También tenemos al campesino con sus aperos de labranza, la caladora entre sus bastidores, el pescador preparando las jareas, la cestera elaborando las canastas para las labores del campo…

Encontramos al zapatero afanado en sus labores de remiendo del calzado tanto para la labranza como para el paseo, moldeando el cuero y la piel con sus utensilios: limador, hilo… También tenemos en esta muestra a la tejedora de redes de pesca, habitualmente oficio reservado a la mujer del pescador, encargada de zurcir las artes para faenar, tanto redes como trasmallos. Sin olvidar a las bordadoras, artesanas del hilo. Ni a la vendedora de flores con sus esteras.

La muestra se puede visitar en la sede del Recreo en la calle Ruiz de Padrón de Santa Cruz. Las distintas estaciones se reparten entre el hall y la escalinata de entrada.

Miguel Ángel Castilla explica que “se trata de una exposición que el Círculo ha querido montar con motivo de las fiestas de mayo en la capital. Debemos agradecer el interés mostrado por Modas Marilyn de Julio Tacoronte, que ha cedido las vestimentas”.

A Miguel Ángel Castilla le gusta recalcar que “no se trata de una exposición de trajes típicos como se podría pensar. La idea de esta muestra es rescatar la forma de vestir de nuestros antepasados, en aquellos oficios de antes y que se han ido perdiendo”. Los distintos trajes se muestran en diferentes ambientes, que tienen que ver con las labores que tanto ellas como ellos desempeñaban, con una gran cantidad de detalles, muchos de ellos auténticos. Todo el conjunto está rematado con una cruz, como homenaje a las fiestas fundacionales de la capital de la isla.